El realizador chino recibirá este año el premio Jaeger-LeCoultre Glory por su película “Ying” y se convertirá en el único en ser reconocido con todas las distinciones importantes del certamen en menos de 10 años. Sus mejores filmes.
¿Por qué Hong Kong consideró indecente “La muerte del comendador”, la obra del escritor japonés? Adelanto de algunas escenas sexuales para analizar si, como plantean los chinos, se trata de una novela pornográfica.
El realizador chino recibirá este año el premio Jaeger-LeCoultre Glory por su película “Ying” y se convertirá en el único en ser reconocido con todas las distinciones importantes del certamen en menos de 10 años. Sus mejores filmes.
Liu Yongbiao asesinó a cuatro personas hace casi 24 años pero fue detenido recién en 2017. Se inspiró en el grave delito que cometió para escribir “El secreto culpable”, una de sus novelas.
Muchos escritores, desconocidos la mayoría en Occidente, han mostrado la diáspora de millones de indios en Kenia, Sudáfrica y Tanzania, entre otros países. De Ngugi wa Thiong´o a Moses Isegawa y Achmat Dangor.
Beijing anunció que triplicará los subsidios a las librerías de la ciudad y construirá 16 tiendas del tamaño de un shopping, además de otros 200 locales tradicionales. El plan de Yunnan para rescatar sus libros antiguos.
Una serie basada en su novela “Juegos sagrados” se convirtió en la primera producción original india de la popular plataforma de streaming. “Niños de medianoche”, de Salman Rushdie, seguirá sus pasos.
La provocadora definición es sólo un ejemplo de la literatura maldita del japonés Osamu Dazai. Los relatos, inéditos en español, que escribió antes de suicidarse y su inevitable comparación con Ryuonosuke Akutagawa.
Debutó en los escenarios en Mongolia Interior y a los 29 años debutó en la pantalla grande. Con los años también se destacó en televisión, como actriz y directora. Ganó hasta los premios que todavía no existen.
“¿Dónde está el dios que adoráis?. Me respondieron que estaba en el cielo como Chukwu. Entonces les pregunté quién era aquel al que habían dado muerte, el que había colgado en el palo de madera fuera de la misión. Me explicaron que era el hijo, pero que padre e hijo eran iguales. Fue entonces cuando me di cuenta de que el hombre blanco estaba loco”
(fragmento de la novela “La flor púrpura”)